miércoles, 23 de diciembre de 2015

La carrera de una gimnasta

Cada segundo cuenta. El tiempo que tardas en recogerte el pelo en un moño, esos segundos de más que dedicas a probar un nuevo peinado que le has visto a tu gimnasta preferida, estar tan nerviosa que tienes que pedir ayuda a tu entrenadora con el maquillaje. Ponerte el maillot, esa manía de recolocarte las punteras mil veces, secarte las manos con tu toalla de la suerte y coger el aparato; saltar, respirar, cerrar los ojos, olvidar que te vas a jugar meses de entrenamiento en menos de dos minutos. Sentir que el reloj se detiene hasta que escuchas el inicio de tu música y entonces, te dejas llevar.

A lo largo de la carrera de una gimnasta hay millones de momentos especiales que queremos conservar para siempre: la primera vez que pisas un tapiz y te parece inmenso, hasta que un día sientes que te pasarías el doble de horas sobre él, entrenando, perfeccionando, inventando maestrías con las que sorprender. Ese entrenamiento con tu conjunto en el que todo te sale mal y sólo piensas en terminar, hasta que el abrazo de tus compañeras te consuela y te das cuenta de que se han convertido en hermanas. Cuando te pruebas el maillot nuevo, ese con el que siempre has soñado y al que has dedicado infinidad de horas cosiendo y pegando pedrería. Esos instantes que te dejan sin aliento: el hormigueo que sientes al escuchar tu nombre en una competición, los aplausos, las lesiones, los fallos, el abrazo de tu entrenadora al finalizar el ejercicio, apretar los dientes minuto y medio para mostrar tu trabajo. ¿Los recuerdas?


Es difícil elegir el punto de inflexión de tu carrera; ¿una medalla? ¿el día en el que finalmente te salió ese elemento que llevabas toda la temporada intentando? ¿una lesión que te demostró que eras más fuerte de lo que creías? ¿una retirada que convirtió tus años como gimnasta en un suspiro? Estas Navidades os invito a recordarlo junto a Hofmann, que sortea 3 Álbumes Classic de 22 páginas entre nuestros seguidores para que podáis recopilar esas vivencias que la gimnasia os ha dado, lo bueno y lo malo, y esas experiencias se conviertan en inspiración para cada reto que afrontéis de ahora en adelante.



¿Queréis participar? Os animamos a buscar entre vuestra colección de fotografías ese momento especial en la gimnasia que os sigue emocionando, tanto personal como de alguno de vuestros referentes a seguir internacionalmente. Compartid la imagen por twitter con el hashtag #RGHofmann y el 6 de enero anunciaremos los tres ganadores.

No hay comentarios:

Publicar un comentario